Preciosa casa de alquiler en Ibiza

Alojarte en 'Can Marge' es viable por un periodo de una semana, dos o incluso meses. Durante ese tiempo tu vista viajará de forma constante hacia el valle que descansa a sus pies, las montañas que la flanquean o, incluso, las muestras de arquitectura ibicenca, como la iglesia de Sant Vicent que te saludará a lo lejos. Cuando te canses de mirar toda la belleza que te rodea, hazme un favor, entra en la casa y respira sus mil aromas. En invierno disfruta de la leña ardiendo y crepitando con tamices de unos árboles únicos, de otros tiempos, que te evocarán seguro a aquellas tardes en las que no se necesitaba nada más que un buen fuego para imaginar mil juegos. En verano entra en cada una de nuestras habitaciones y recorre la calidez de sus paredes gruesas, que te salvaguardarán del calor transportándote a aquellos hogares de antaño, sólidos y llenos de vida.

 

Descansa en nuestra piscina, bañate en un remanso de paz y siéntete tú mismo. Acto seguido recoge una de las frutas de nuestros árboles, dispuestas para tu disfrute, y recupera los momentos de ocio que anhelas en tu día a día con tu familia o amigos. Porque en Can Marge hay cabida para todos.

 

Disponemos de cinco habitaciones dobles, tres de ellas con cama de matrimonio y las otras dos con camas individuales. Cunas para los más pequeños y una correcta climatización son algunos de los atractivos de una casa que aúna la tradición con las más modernas comodidades.